Percepción

Percepción y sensación

Desde su origen griego (katálepsis) al latín (percipere -de per y capere-) la palabra percepción deviene de la acción de recoger y obtener conocimiento, en el sentido de apoderarse de algo.

La percepción es la conciencia de una sensación. Es el proceso psicofísico en que el sujeto transforma las impresiones sensoriales (estímulo), previamente transportadas a los centros nerviosos, en objeto sensible conocido. La percepción se desarrolla cuando la aprehensión de la realidad es el objetivo principal y construye una totalidad evitando ser una impresión sensorial aislada o un haz de impresiones sensoriales. Uno de los fundadores de la teoría política, el inglés Thomas Hobbes (1588- 1679) aseguró que

“No existe ninguna concepción en el intelecto humano que no haya sido recibida, totalmente o en parte, por los órganos de los sentidos.”

Los sentidos son vías de incorporación de información. A esta se la considera como el estímulo sensorial que afecta al comportamiento de los individuos una vez percibidos y procesados porque cambia el estado del conocimiento. 

Sensación y percepción constituyen, en el hombre, el mismo proceso del conocimiento sensible, y ninguna de ellas es meramente activa o pasiva, sino que ambas son receptoras y efectoras. 

Se percibe una calle o un grupo humano, por ejemplo, no vemos colores, luz y sombras o distancias y sonidos esparcido o sumados. Conocer el proceso de organización de la imagen partiendo de reconocer los elementos que lo componen, es un aprendizaje imprescindible para quien necesite trabajar con las imágenes. La percepción se distingue de la sensación, entendida como proceso meramente fisiológico, con fines didácticos o de investigación. Sensación y percepción constituyen, en el hombre, el mismo proceso del conocimiento sensible, y ninguna de ellas es meramente activa o pasiva, sino que ambas son receptoras y efectoras

Los trilobites aparecieron al inicio del Paleozoico, hace unos 540 millones de años y se extinguieron hace unos 240 millones de años. Se describieron cerca de 22000 especies. Tenían un cuerpo aplanado dividido en tres partes, de donde proviene su nombre. En la cabeza o céfalon tenían un par de grandes ojos compuestos muy evolucionados. Los trilobites fueron los primeros animales en desarrollar ojos complejos, lo que les permitió desplazarse hacia la luz, el calor y por alimento, lo que debió influir en su extendida evolución de 300 millones de años.

La sensación (del latín sensibilem, sensible) es la capacidad de un ser vivo de percibir estímulos externos e internos a través de los sentidos. Por esta función del sistema nervioso los órganos sensoriales (receptores) transmiten las variaciones físicas o químicas que provienen del interior del individuo o de su medio externo. Todo el proceso perceptivo es eminentemente temporal. Los sentidos nos informan del estado de las cosas que nos rodean y cada uno es selectivo respecto a lo que incorpora. El ojo -de modo electromagnético-, la piel y el oído -por medios mecánicos- ofrecen información temporal y espacial tridimensional. El tacto es el más generalizado y comprende: la sensibilidad cutánea (sensibilidad al dolor, la presión o la temperatura), la cinestesia (sensibilidad originada en músculos, articulaciones o tendones que informan sobre el movimiento del cuerpo), orgánica (sensibilidad en los órganos internos) y laberíntica (la relacionada con el equilibrio).

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *